viernes, 20 de mayo de 2011

El Buró

Una pequeña agencia de informes y seguridad, conocida originariamente como “El Buró” (1943)  prestó sus servicios de información sobre proyectos técnicos y científicos que relacionados con la búsqueda - y el encuentro - de inteligencia extraterrestre. Brindaba esta información a un reducido número de personas, entre las que se contaban altos funcionarios del Gobierno. No fue la cantidad sino la perfección de sus informes lo que la caracterizó. La mayor preocupación de quienes lideraron la agencia fue poseer en todo momento información única de primera mano.
“El Buró” como hasta hoy se conoce familiarmente a sus continuadores, elaboro informes de carácter confidencial sobre  los fenómenos y proyectos mas espectaculares y celosamente guardados por los departamentos estatales de varias potencias. Esto fue hasta que en el año 1981, sin causa aparente dejo de asistir a quienes le habían acompañado durante casi cuarenta años.
“El buró” dependía  - o era un apéndice -  de una organización internacional de carácter muy reservado llamada “Contestation Holdyng & Co.”, su dirección (inexistente en realidad) figuraba en la tercera avenida de la isla de Manhattan, solo un numero de telex era su conexión con el mundo, ella era quien proveía los informes detallando las actividades secretas del gobierno, sus instalaciones y proyectos. Su red de informantes le permitía adelantarse a las agencias oficiales cuando sucedían los fenómenos o encuentros de cualquier tipo.
En el año 1981 un escueto telex llego al despacho del buró - cuya sede funcionaba en una de las oficinas de una torre de cristal de la Avda. Madero 1020 en Buenos Aires -  Decodificado el mensaje decía más o menos lo siguiente:

“Enviamos ultima remesa de la novela Migración – Stop –

Disponible con documentación de Ramos – Stop-
Día 28/09/81 en Aduana Río Grande, Tierra del Fuego - Stop
Precauciones generales antes de abrir,  C.H.& Co – Stop -
We closed our agency - no more shipments - We were the best – Stop –“

Este fue el último mensaje. Ramos un hombre de 50 años, sin filiación personal - conocido por los suyos como el presidente del buró, conservaba una extensa documentación sobre los diferentes temas que habían pasado por sus manos, el como todos los que estaban relacionados con el buró y la CH & co., formaban parte de un mito, vestían trajes, camisa, corbata, calcetines y anteojos de color negro. Su casi imperceptible presencia en todos los acontecimientos relacionados con lo desconocido, les habían convertido en los más extraños personajes heroicos del último siglo, ellos eran la Leyenda.
El presidente del Buró pidió a sus hombres que esperasen su regreso, sabía que el envío debía contener información clasificada, pero fuese lo que fuese, algo era irreversible...  Los hombres de negro habían desaparecido.
Ramos llego al aeroparque de la ciudad de Río Grande envuelto en una fría lluvia, e inmediatamente se dirigió a la oficina de aduanas, limpió el barro de sus zapatos y retiro con un sencillo trámite un paquete muy pequeño, mucho mas pequeño de lo que el había imaginado, sus manos le temblaban, se dirigió casi corriendo al hotel donde había reservado una habitación, ni siquiera se tomo un tiempo para sacarse la fría y húmeda ropa, tomo un bolígrafo y rasgó el sobre de donde aparecieron dos artefactos que el no había visto jamás y otro, bastante conocido en los envíos especiales de la CH, era un pequeño contenedor de gel explosivo destinado a destruir el envío, si este era abierto por cualquier curioso que no fuera su destinatario. Las otras piezas eran un par de  guantes finos – de color negro por supuesto - uno de ellos con una malla a la altura de la muñeca que sostenía una pequeñísima caja similar a la de un reloj, con solo un botón oval casi imperceptible y un par de anteojos de aspecto casi normal, a no ser porque eran tan livianos y deformables como una esponja, una nota en el interior del contenedor decía: “Tome asiento, colóquese los guantes, presione el interruptor en la muñeca y colóquese los anteojos”. Inmediatamente Ramos se sentó en un sillón y siguió las tan simples instrucciones, inmediatamente salto hacia atrás, la habitación había cambiado, estaba sentado en una sala de colores suaves y frente a el, tres personas de las cuales solo conocía a una de ellas, este era un excéntrico personaje, ex patrón de Ramos en sus tiempos juveniles.

En los Años 50, cuando tenia solo 20  años y antes de ingresar a las oficinas de el buró, el había ingresado como dependiente en una librería de la calle Esmeralda que buscaba un joven con pasión por los temas técnicos de avanzada, allí de las manos de su patrón, un cuarentón con acento extranjero que se hacia llamar Mr.Dan, aprendió a catalogar libros e informes que llegaban desde los mas lejanos lugares del mundo. Al joven Ramos no se le permitía leer ninguno de ellos, solo debía catalogarlos por código alfanumérico y prepararlos para su posterior traducción, la cual era misteriosamente rápida. Durante los dos años que duro su trabajo llego a apreciar mucho a Mr. Dan, pero de buenas a primeras fue despedido y otro joven ocupo su lugar. Su jefe solo le dio las gracias, y un sobre que contenía el equivalente a un año de sueldo y una nota presentación para una compañía de informes llamada “el buró”.

Levanto sus anteojos y allí estaba la sala del hotel, al bajarlos, estaba de nuevo en este lugar desconocido, estaba acostumbrado a las sorpresas técnicas - desde el año ´69 ellos usaban pequeñísimos aparatos de comunicación total muy superiores a los celulares que aparecerían decenios después – pero esto era sorprendente. Precisamente fue Mr. Dan quien hablo:

-         Mister Ramos, muy bienvenido! No te sorprendas. Estas usando una tecnología que será común al finalizar la segunda década del próximo siglo. A lo que ves, lo llamamos instancia cero, pero será conocida a fines de siglo como realidad virtual, al pequeño aparato de tu muñeca, lo denominamos MIM, es la progresión de tu nueva IBM, su capacidad de almacenamiento es de 2000 terabytes – 100 millones de veces lo que posee tu disco duro - su velocidad  ya no se maneja en ciclos de reloj, y su cerebro el microprocesador, ni siquiera tiene alguna relación con estos, se basa en una tecnología holográfica que ni siquiera quienes la desarrollarán en el futuro tendrán conciencia plena de como funciona. Es indestructible, tiene sentimientos, y todo es accesible en forma instantánea, su autonomía es de 200 años y su manejo es realmente fácil, ahora Mr. Ramos prepárate para un viaje increíble...

Durante mas de una hora Ramos estuvo sumergido en un torrente de información guiada, visito lugares desconocidos, ingresó en bases ultrasecretas, a la tan conocida “área 51”, donde pudo observar como seres similares a los del caso Rockwell, la gran mentira creada por el gobierno de los EE.UU., estaban a cargo del transferir una tecnología no conocida aun por el mundo, de la manera mas rápida que la humanidad pudiera absorberla e incluso llegado el caso, mas rápido de lo que esta soportaría. Pudo ver una multitud de naves, algunas muy averiadas rodeadas de técnicos y siempre la presencia de estos seres, pudo ver ensayos termonucleares anulados con campos de algún tipo de energía que los reducía a prácticamente nada, transferencia de materia, paradojas temporales y experimentos climáticos destinados a suplantar las armas convencionales.
Durante todo el día Ramos estuvo indagando el manejo de su MIM, podía alargar su mano y tomar una imagen y explorarla como quisiera, se podía convertir en una molécula y ver como actuaban fuerzas naturales, era imposible almacenar tanta información en su mente. Salio de su cuarto, y bajo a cenar... no pudo hacerlo.
Mr. Dan quien secretamente había sido el encargado de reclutarle entre otros cientos de jóvenes y llevarlo hasta alcanzar la presidencia del buró, ahora le encomendaba dar por terminada toda actividad, y destruir toda la información guardada en los archivos y la agencia, se salvaba solo esta pequeña maravilla tecnológica en la cual se revelaba el último secreto, muy pocos sabían lo que el mundo ignoraba, todo el armamento y la tecnología creadas en las guerras humanas solo eran ensayos para otra cosa, la ultima guerra que vería la humanidad, pero a diferencia de todas las anteriores, seria contra una especie que venia desde ningún lugar.
Ramos dejo el hotel y camino sin rumbo por las todavía heladas calles de la región mas austral del mundo, pensaba en los desarrollos que ocurrirían en los próximos años, sabia cosas que todos los que pasaban a su lado ignoraban, tomo su pequeño teléfono e intento llamar a la central, pero no se activo, todo lo que dependía de CH & Co. Había desaparecido, el telex no estaba disponible, llamo por un teléfono normal, el número no correspondía a ningún abonado, decidió regresar inmediatamente.
Entro al imponente edificio de cristal, en el directorio de empresas, la oficina ya no tenia asignado un nombre, preguntó en la oficina de recepción, las oficinas se habían trasladado, Mr. Dan le había enviado lejos para destruir la organización, Ramos dudaba ya de su propia existencia, se sentó a orillas del puerto, se coloco los anteojos y pregunto en voz baja, dime Mim, como empezó todo esto?
Ante sus ojos aparecieron las primeras imágenes, la capacidad de Mim de integrar imágenes a voz y pensamiento era asombrosa, podía generar en base a un relato una especie de película animada, con imágenes reales.
Las horas transcurrían y Ramos trataba de asimilar el conocimiento de la forma mas rápida posible sin llegar a perder la razón, la historia era en realidad una visión diferenciada de ciertos escritos sagrados, convivían en su mente la actualidad, el pasado y un terrible futuro a solo unos años por llegar, a cada pregunta Mim respondía con una impresionante cantidad de información que se transfería a la mente de Ramos a la velocidad máxima que este podía asimilarla.
Ramos volvió a su departamento, como era de imaginar ya no vivía más allí, casi no tenia dinero en sus bolsillos, intento quitar sus guantes, solo intento hacerlo porque un dolor indescriptible hizo que desistiese, formarían desde ese momento al igual que sus anteojos parte inseparable de su cuerpo...

Hoy el “Buro” ha regresado ya no en su forma tradicional sino transformado en “Magnitud 5”, entidad de carácter virtual, que solo existe como un Blog en Internet, creada por decisión del que hasta en el aquel entonces era un integrante del buró.